Tras negar públicamente su apoyo al cierre, CCOO emite un nuevo comunicado en el que acepta la clausura como “la opción menos perjudicial” tras una reunión con responsables del Consorcio.
El conflicto por el cierre del retén de bomberos de Manilva suma un nuevo capítulo. La Sección Sindical de CCOO del Consorcio Provincial de Bomberos de Málaga, que hace unos dias negaba haber pedido o apoyado el cierre, ha emitido este jueves un nuevo comunicado oficial en el que modifica su postura y respalda la medida, tras participar en una reunión de la Mesa General de Negociación.
El comunicado, firmado hoy 12 de junio y al que ha tenido acceso esta redacción, recoge que durante la reunión celebrada el día anterior, se expusieron por parte de responsables del Consorcio —incluidos el director técnico, el oficial de zona 5, el presidente y el gerente— los motivos técnicos que justificarían el cierre inmediato del retén, afirmando que las deficiencias detectadas “son imposibles de subsanar”.
De la crítica a la aceptación
El giro de CCOO es llamativo, especialmente tras haber rechazado rotundamente su respaldo al cierre en una nota de prensa previa, donde afirmaban que su informe sindical presentado en diciembre de 2024 solo pretendía mejorar las condiciones laborales, y que en ningún momento se pedía o sugería clausurar el retén.
Sin embargo, en su nueva valoración, la Sección Sindical sostiene que:
“Entendiendo la inviabilidad de subsanar los defectos de salud laboral que presenta el actual retén de Manilva, consideramos que la reubicación provisional del personal en el Parque de Estepona […] es la opción menos perjudicial tanto para la plantilla como para la ciudadanía”.
Reubicación y promesas de un nuevo parque
El sindicato también informa de que se está trabajando en un acuerdo institucional entre el Ayuntamiento de Manilva, el de Casares y la Diputación para la construcción de un nuevo parque de bomberos en la zona, con financiación provincial y ubicación aún por definir (entre Manilva y Casares Costa), pero analizando fríamente como se encuentran en estos momentos las relaciones institucionales y el clima generado entre el arco político de Manilva y Diputación, desde esta redacción nos aventuramos a pensar que Casares podría ser el beneficiario de todo este escándalo ya que ha preferido el diálogo y la moderación a la crispación y alarmismo por el que se ha decantado el Consistorio manilveño.
