Era un día tranquilo en la pedanía de Sabinillas en Manilva. Un vehículo paró en medio de la calle. Bajaron dos personas y comenzaron a amenazar a un hombre que andaba por la vía. Lo metieron a la fuerza en el interior del transporte y huyeron del lugar apresuradamente. La escena asustó a los viandantes, ya que el hecho se produjo a plena luz del día en una conocida zona turística. La centralita de la Guardia Civil recibió numerosas llamadas relatando que dos individuos habían abordado a una persona y la había introducido a la fuerza en un vehículo.

Fue cuando la Guardia Civil inició un intenso operativo en la zona con el fin de localizar a la víctima y a sus captores. En ese momento, se tuvo conocimiento por parte de los investigadores de que, poco antes de este secuestro, se había producido un hecho similar. Los mismos hombres habían llevado a cabo otro secuestro. La víctima era también abordada en la calle y a plena luz del día por los captores, que la metieron a la fuerza en el vehículo. Pero éste logró escapar saltando del coche en marcha. En una céntrica rotonda, aprovechó la disminución de la velocidad para huir a la carrera. Pese a que fue seguido, logró fugarse.

Ante el capo

A los escasos minutos, los dos captores actuaron nuevamente, pero éste no escapó y fue conducido hasta una urbanización de Casares, donde se le presentó ante un tercer individuo, jefe del grupo criminal. Tras interrogarle y someterlo a amenazas y golpes, dispuso su liberación. Las dos víctimas son de nacionalidad italiana, no sufrieron ningún daño, salvo algunos golpes recibidos –afirman fuentes de la investigación–.

Ambos eran miembros de la misma banda criminal dedicada al tráfico de drogas. Según fuentes de la investigación, «hicieron algo que no debían haber hecho», por lo que el jefe de la banda requirió su presencia a las bravas. «Fue un toque de atención que no van a olvidar en tiempo», explican las fuentes, que remarcan que los dos retenidos fueron golpeados por sus captores.

Rápida intervención

Los hechos ocurrieron el pasado 9 de marzo. De la investigación se hicieron cargo el Equipo de Delitos Contra las Personas de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil de Málaga y efectivos de la Compañía de la Guardia Civil de Marbella. La «Operación Rapidito» arrojó resultados rápido. Ese mismo día fue localizado y detenido uno de los autores, también de nacionalidad italiana, al cual le constan numerosos antecedentes por narcotráfico. Le fue decomisado el vehículo utilizado para cometer los dos secuestros.

A consecuencia de la investigación ha sido detenido un marroquí, que es el jefe de la organización y el que llevó el interrogatorio a uno de los secuestrados. También ha sido localizado un dominicano como el segundo secuestrador. Éste huyó a un tercer país de la Unión Europea y tiene solicitada una Orden Europea de Detención y Entrega.

La Guardia Civil ha realizado varios registros de viviendas en Manilva y Casares, interviniéndose gran número de teléfonos móviles, dispositivos de captación de imágenes y sonido y diversa documentación. A los detenidos se les acusa de los delitos de detención ilegal, amenazas y pertenencia a organización criminal.

Fuente: ABC Sevilla

Diseño Web Manilva
Artículo anteriorEl Alcalde desmiente a la A.S.M.
Artículo siguienteNuevo Sargento de la Guardia Civil

1 COMENTARIO

  1. Pues como vemos LA GRAN mayoria de los delitos los provocan personas no españolas……y sobre todo que proceden de otro lado dle mediterraneo….

    Que cada uno saque sus conclusiones. Pero los buenismos en ningun aspecto de la vida conducen a nada bueno para una sociedad.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí