Desde el Comité de Empresa del Ayuntamiento de Manilva nos vemos obligados, una vez más, a salir a la opinión pública a aclarar informaciones absolutamente falsas e infundadas emitidas desde el propio Ayuntamiento. En la tarde de ayer, jueves 21 de marzo, dos agentes de la Policía Local de Manilva notificaron a 6 trabajadores del Ayuntamiento el decreto de despido firmado por la alcaldesa de Manilva, Antonia Muñoz, argumentando que eran despidos objetivos por causas económicas.
A estos despidos hay que sumarles otros 15 realizados con anterioridad, lo cual, sumado a la cantidad de trabajadores municipales que despidió Antonia Muñoz a su llegada a la alcaldía en 2007 y siguientes que han tenido que ser readmitidos por sentencias judiciales e indemnizados, la cifras que los manilveños están pagando por los caprichos de una gobernanta visceral están resultando ser del todo intolerables.
Desde el Ayuntamiento se asegura igualmente que fueron los sindicatos los que no aceptaron la negociación del Plan de Ajuste, algo que tenemos que negar rotundamente ya que después de varias reuniones mantenidas el año pasado, fue el equipo de gobierno el que decidió romper las negociaciones, a través del Concejal de RRHH y el Asesor Jurídico municipal que perteneció a la junta directiva de IU local, en el momento en que el Comité de Empresa solicitó documentación económica que a Muñoz no le interesaba entregar por motivos que todos conocemos.
Los sindicatos, a través de los secretarios de organización provincial de la FSP de UGT y CCOO, planteaban eliminar las productividades recogidas en convenio y horas extras, así como las gratificaciones que desde el equipo de gobierno se vienen otorgando a personal municipal vinculado con Izquierda Unida, o con la propia alcaldesa o con ediles del equipo de gobierno, que podrían suponer en torno a los 94.000 € anuales y que se vienen abonando de forma arbitraria sin consenso con el Comité de Empresa ni conocimiento del pleno municipal.
Además, para que no se llegara a despedir a ningún trabajador, desde el Comité se planteó la reestructuración de la plantilla municipal con la participación de los representantes sindicales en la misma, llegando incluso a poner encima de la mesa la posibilidad de que, si esta medida era insuficiente, se estaba incluso dispuesto a aceptar una reducción salarial de toda la plantilla municipal con el objetivo de evitar despido alguno, fin último y único perseguido por el equipo de gobierno como los hechos vienen demostrando.
Además, para que no se llegara a despedir a ningún trabajador, desde el Comité se planteó la reestructuración de la plantilla municipal con la participación de los representantes sindicales en la misma, llegando incluso a poner encima de la mesa la posibilidad de que, si esta medida era insuficiente, se estaba incluso dispuesto a aceptar una reducción salarial de toda la plantilla municipal con el objetivo de evitar despido alguno, fin último y único perseguido por el equipo de gobierno como los hechos vienen demostrando.
En definitiva, la alcaldesa de Manilva por IU, Antonia Muñoz, vuelve a aplicar su propia ley “Quítate tu para ponerme yo”. Recordemos que actualmente se encuentra imputada por clientelismo político al contratar a cerca de un centenar de familiares y simpatizantes de IU, de entre los cuales se encuentra su propia hija, y por otorgar facturas a las empresas de su marido y su primo hermano por un valor superior al medio millón de euros.