El esfuerzo y dedicación principalmente de la comunidad educativa, profesores, AMPAS e implicación de la Delegación de Educación del Ayuntamiento de Manilva, han logrado que un inicio escolar excepcional y con muchas dificultades haya transcurrido con normalidad en todos los centros escolares del municipio, donde unos 1.800 alumnos han podido volver a clase.
Estos primeros días vienen marcados por la flexibilidad horaria en las entradas y los periodos de adaptación para los más pequeños que ha ocasionado cierta aglomeración de padres y madres en las entradas de algunos centros. El cumplimiento, por parte de los padres, del distanciamiento social será una asignatura pendiente para los próximos días en los que tienen que aprender a convivir con estas normativas.
En cuanto a los comedores, dos colegios de la localidad no pudieron iniciar su actividad con normalidad al verse afectados por la quiebra, presentada hace escasamente 48 horas, de la empresa de catering Perea Rojas y donde desde la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía y los propios colegios afectados, ya están trabajando, para poder darle una solución cuanto antes a esta problemática que afecta negativamente a las familias.
