Ante la evidencia de que ha contratado a su primo para el movimiento de tierras en lo que será el futuro Centro de Interpretación del Vino, la alcaldesa de Manilva, Antonia Muñoz, quiere tirar balones fuera: primero, dice que la adjudicación fue “totalmente legal” y, además decide atacar a Rafalux, la empresa en la que trabaja el portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Manilva, Salvador Zotano.
Desde el PSOE de Manilva, su Secretario General Diego José Jiménez, criticaba que el único argumento de la alcaldesa sea “y tu más”, mientras añadía que “de no haber ningún problema en la adjudicación suponemos que nos facilitará los informes técnicos y jurídicos que solicitó nuestro grupo el pasado jueves 11 de marzo”.
Para los socialistas la adjudicación del movimiento de tierra se hizo sin que existiese proyecto técnico ni estudio geotécnico y, además se cambio el uso del suelo: allí iba una plaza pública. ¿Es legal, señora alcaldesa, trocear un proyecto (inexistente) y adjudicar una parte a un familiar? ¿Quién lleva la dirección técnica? ¿Existe dirección técnica? ¿Es legal que el propio ayuntamiento incumpla el PGOU vigente, construyendo un edificio donde debería haber una plaza pública?
Para los socialistas está “relación” que mantiene este familiar de la alcaldesa con el ayuntamiento no es nueva. Durante la pasada semana se han realizado movimientos de tierras en las playas de la localidad que también han sido ejecutados por esta misma persona, y pagado con dinero municipal, ¿también es una adjudicación legal? Si el ayuntamiento cuenta con operarios y dos máquinas, ¿no podían haber realizado ese trabajo los trabajadores municipales?
En cuanto a Rafalux, decir que es una de las mayores empresas del municipio, empresa homologada que ha trabajado y sigue trabajando para el Ayuntamiento de Manilva, y para otros municipios y entidades públicas.
Jiménez consideró “inaceptable que los ataques políticos que Muñoz pretende hacer a nuestro grupo los dirija a Rafalux”. “Esta empresa cuenta con más de 30 empleados, a quienes mantiene y paga puntualmente su sueldo, algo de lo que debería tomar nota la señora alcaldesa, sobre todo cuando la menciona alguien quien, además de no pagar los sueldos a los empleados municipales se permite el lujo de irse de vacaciones a Egipto, a pasarlo bien, mientras sus trabajadores sudan tinta pensando en como pagar hipotecas, préstamos y otros servicios.”
