La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha declarado hoy el brote de coronavirus “pandemia global”. El director general de la organización ha asegurado en rueda de prensa que el elevado número de casos fuera de China hace necesario cambiar la definición de epidemia a pandemia. Tedros Ghebreyesus ha señalado: “Estamos preocupados por los niveles alarmantes de propagación y por los niveles alarmantes de inacción”. El director general de la OMS ha asegurado que la palabra pandemia “no se puede usar a la ligera”. “Es una palabra que, mal usada, puede causar un miedo irracional, o la aceptación injustificada de que la lucha se ha acabado, lo que llevará a un sufrimiento innecesario y a la muerte”, ha añadido.
El director general de la OMS ha informado de que el número de casos de Covid-19 en las últimas dos semanas se ha multiplicado por 13 fuera de China, epicentro del brote de coronavirus, registrándose más de 118.000 casos en 114 países y 4.291 muertes. También ha asegurado que más del 90% de todos los contagios se han producido únicamente en cuatro países, y que dos de ellos (China y Corea del Sur) ya han conseguido rebajar el número de casos.
La declaración de pandemia es consecuencia del número de países afectados, es decir, de si buena parte de la humanidad está potencialmente expuesta al virus. La última pandemia que declaró la OMS fue la de la gripe A (H1N1, también llamada gripe porcina), en junio de 2009. En aquel momento había confirmados 29.000 casos (la enfermedad se había detectado en abril) y 144 fallecidos. El final de la pandemia se declaró en agosto de 2010. Era la primera pandemia de gripe que declaraba la OMS en 40 años. La anterior empezó en Hong Kong en 1967.
El máximo responsable de la OMS ha asegurado también que describir la situación como pandemia no cambia la evaluación que está haciendo la organización de la amenaza que supone el coronavirus. “No cambia lo que está haciendo la OMS y tampoco cambia lo que deberían hacer los países”, ha añadido. “Hemos estado pidiendo cada día a los países que tomen medidas urgentes y agresivas. Hemos dado la señal de alarma alto y claro”, ha asegurado.
El experto ha señalado que 81 países no han comunicado ningún caso de coronavirus y que 57 han registrado 10 casos o menos: “No podemos decirlo más alto, más claro o con más frecuencia: todos los países están a tiempo de cambiar el curso de esta pandemia”. Y ha añadido: “Si los países detectan, hacen el test, aíslan, buscan los contactos y movilizan a su ciudadanía en la respuesta, los que solo tienen un puñado de casos de Covid-19 pueden prevenir que se conviertan en grupos de transmisión y que estos se conviertan en transmisión comunitaria”.
Ghebreyesus ha asegurado que incluso los países con transmisión comunitaria o con grupos de transmisión grandes han conseguido cambiar el rumbo del coronavirus. “Varios países han demostrado que el virus puede ser reprimido y controlado. El desafío para muchos países que ahora se encuentran en ese punto no es si pueden hacer lo mismo, es si lo van a hacer”, ha añadido.
La OMS es consciente de que las medidas para ralentizar la expansión del virus “están cobrándose un caro peaje en las sociedades y las economías, como ocurrió en China”. Los países, ha asegurado el director general, “tienen que encontrar el equilibrio entre proteger la salud, minimizar el trastorno económico y social y respetar los derechos humanos”. Y ha recordado qué se espera de los países: “preparad vuestros hospitales, proteged y entrenad a vuestros sanitarios. Cuidémonos unos a otros”.
El director general ha asegurado que algunos países están teniendo dificultades por “falta de capacidad”, otros por “falta de recursos” y algunos por “falta de decisión”. El experto ha terminado la rueda de prensa asegurando: “Estamos junto en esto, para hacer las cosas adecuadamente, con calma y para proteger a los ciudadanos del mundo. Puede hacerse”.