El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Manilva ha iniciado la aplicación de medidas contempladas en el Plan de Ajuste aprobado por el Gobierno para acogerse al Real Decreto 4/2012 para el pago a proveedores. En este sentido, se ha iniciado la comunicación de los decretos de despido a los representantes sindicales y a los afectados en esta ocasión. En total se trata de ocho trabajadores del Ayuntamiento de Manilva, la mayoría de los cuales ocupaban una plaza que no contaba con habilitación presupuestaria y desempeñaban tareas en servicios que estaban sobredimensionados. Las plazas que se anulan con estos despidos no serán ocupadas y desde el equipo de gobierno informan que este personal tendrá la categoría de preferente en el momento en el que se realice alguna contratación en el Ayuntamiento.
Por otra parte, entre las medidas adoptadas también se ha mantenido en las últimas semanas algunas reuniones con trabajadores que han optado por desarrollar sus tareas en otros departamentos donde se demandaba personal.
Asimismo, en los próximos días se convocará a los representantes sindicales para retomar las negociaciones con el objetivo de planificar nuevas medidas en materia de personal que eviten tener que incrementar el número de despidos.
Cabe señalar que el equipo de gobierno inició meses atrás una serie de contactos con los sindicatos UGT y CC.OO., que integran el Comité de Empresa municipal, primero en Málaga y luego en Manilva, que quedaron suspendidas hace más de un mes.
El equipo de gobierno asegura no haber contado con la colaboración de los representantes sindicales ya que pretendían reducir el capítulo I del presupuesto municipal únicamente con la eliminación de algunas productividades y pluses, que en ningún caso se han considerado suficientes para el ahorro que el Ayuntamiento de Manilva necesita para hacer frente a sus compromisos de pago.
Igualmente, desde el equipo de gobierno se planteó la reorganización interna de personal para suplir la demanda que existe en algunos departamentos municipales cuando por el contrario, otros están sobredimensionados en lo que a personal se refiere. En principio estuvieron de acuerdo en reducir a un 70 por ciento la jornada de los profesores de
Por otra parte, se habló de una reducción salarial del 10 por ciento a toda la plantilla que tampoco fue aceptada. Desde el gobierno manilveño también se planteó, en el caso de tener que llegar a los despidos, que estos se realizaran en aquellos puestos de trabajo que no cuentan con su correspondiente partida presupuestaria o en los casos en los que hay más de un miembro de una unidad familiar contratado y son servicios en los que hay exceso de personal.
Ninguna de estas medidas fue aceptada por los sindicatos, quienes argumentaron que al tratarse de medidas restrictivas debería afrontarlas el Ayuntamiento en solitario.