Se prohibe hacer botellón en Manilva

La reunión del presidente del Gobierno andaluz, Juanma Moreno, con los alcaldes de las ocho capitales concluyó ayer con el consenso de poner límites al ocio nocturno y evitar que los ‘botellones’ de los jóvenes se conviertan en un foco de contagio del coronavirus, pero sin cerrar los bares y discotecas para no dañar la economía de este importante sector en la comunidad. El objetivo es poner freno a los rebrotes que, por lo pronto, están arruinando la imagen de región segura cara al turismo de verano con 34 grupos de contagio, para lo que la Junta y los ayuntamientos han puesto el foco en los ‘botellones‘.

El Gobierno andaluz aprobará hoy una orden de la Consejería de Salud en la que, amparándose en su autoridad por la pandemia de Covid-19 y la ley de Salud Pública, declarará el ‘botellón’ como «actividad nociva, peligrosa e insalubre». Esta medida, según fuentes de la Junta, garantizará la actuación de la Policía Nacional para disolver a los jóvenes que se concentren con litronas de alcohol y música a todo volumen en lugares abiertos, casi siempre descampados o parques.

El ‘botellón‘ está prohibido por una ley autonómica de octubre de 2006, que incluso fijaba multas de 300 a 60.000 euros, pero la norma dejaba un resquicio abierto mediante el cual los ayuntamientos podían de alguna manera facilitar espacios en los que hacer la vista gorda para que los jóvenes pudieran socializar según la moda de comprar bebidas y consumirlas al aire libre. Pues bien, la orden que aprobará la Junta este martes cerrará ese resquicio para que el ‘botellón’ quede prohibido del todo en Andalucía mientras dure la pandemia.
La norma también incluirá otras medidas para evitar contagios en los locales cerrados de ocio nocturno, como discotecas y bares con música. Pese a lo que se había barruntado, no habrá cierre de estos, sino que se pondrán límites de horario y aforo. De esta forma se acortan dos horas el cierre y en lugar de a las 7.00 de la madrugada como ahora, se fijará las 5.00 como hora tope. Las barras deben clausurarse. Los clientes solo podrán consumir sus bebidas en mesas con un máximo de agrupación de 12 personas, de forma que se evite la intercomunicación de los grupos y con ello poner coto a la propagación del virus.

Moreno ha presentado estas iniciativas a los alcaldes, que las han apoyado, si bien están a la espera de los términos de la orden que se apruebe hoy para comprobar que se garantizan mecanismos jurídicos necesarios para la prevención y vigilancia de las aglomeraciones. Los ayuntamientos son los responsables de los permisos de apertura y cierre de locales. El presidente ha destacado «la actitud de diálogo y la lealtad institucional de los alcaldes para hacer frente, entre todos, a la pandemia y a las consecuencias que ésta está teniendo en nuestra comunidad», según un comunicado de la Junta. En el mismo, el presidente hace un llamamiento a la confianza y la transferencia de información entre las instituciones en la lucha contra la Covid y la reconstrucción de Andalucía. «Sin los alcaldes y los ayuntamientos no hay posibilidad de arrinconar al virus o intentar paliar sus efectos porque quien crea que se puede conseguir esto sin ellos está equivocado. Los alcaldes y los ayuntamientos son una pieza fundamental», dijo según la nota de San Telmo. Moreno ofreció un almuerzo a los alcaldes de las capitales tras la reunión, en el que siguieron debatiendo sobre las medidas para frenar rebrotes.

A la reunión, enmarcada en los encuentros del presidente de su propuesta de una alianza por Andalucía, asistieron, además del consejero de Salud, Jesús Aguirre, los alcaldes socialistas de Sevilla, Juan Espadas, Jaén, Julio Millán, y Huelva, Gabriel Cruz; Los del PP de Málaga, Francisco de la Torre; Almería, Ramón Fernández-Pacheco y Córdoba, José María Bellido; el alcalde de Cádiz, José María González (Anticapitalistas); y el de Granada, Luis Salvador, de Cs