De resultas de esos estudios se ha establecido que "por la nueva situación creada en el Embalse de La Concepción por efecto de las lluvias acaecidas en los últimos meses, así como el cambio que ello conlleva en las previsiones de aportaciones y de consumo estimadas, todo ello unido a la exigencia de que el volumen de agua embalsado no baje de los cuarenta Hm3 necesarios para asegurar un óptimo abastecimiento de agua a todos los ciudadanos de la Costa del Sol, se ha decidido que la Planta Desaladora cesará en su funcionamiento efectivo desde el 1 de abril al 31 de agosto", según explicó Miguel López, gerente de ACOSOL S.A.
Este cese temporal de la actividad de la Planta supone, según el presidente de la Mancomunidad, que a partir del 1 de abril dejará de aplicarse el recargo de 0,1360 euros/m3 por desalación en los recibos de agua, "de modo que los ayuntamientos habrán de exigir a sus empresas concesionarias del servicio de abastecimiento de agua que no lo cobren a los ciudadanos, pues sería ilegal".
Por otra parte, el cese de la actividad de la Desaladora no será total, dado que necesita un mínimo de funcionamiento para no deteriorarse. Ello significa que de la actual plantilla quedará un grupo de siete trabajadores, mientras que los diecisiete restantes, teniendo en cuenta la situación de crisis actual, en lugar de ser despedidos serán recolocados en otros servicios de la empresa ACOSOL S.A.